Así se llaman ellos y así los define Rosalina Hernández, comisaria de Pumps Project y que desde el 8 de marzo expone "Revolution" de Marchesi en "un corner" de las Cigarreras:
"Los craneozoides emprenden una carrera sin retorno para ganar el seno del óvulo maternal. Suspendidos en el aire, siguiendo los patrones del esperma, bancos de peces o bandadas de pájaros demuestran la fuerza de la vida en su desesperada búsqueda de la continuidad.
Lo primero que conocemos de nuestros antepasados son sus huesos, más tarde sus miedos (religión), y después sus deseos (representaciones).
Marchesi se basa en la ciencia para contarnos el caos de la evolución, este sinsentido solo tiene una intención, la reproducción y por lo tanto, el orden.
Según la biología, el individuo, acabada su función sexual, ya es inútil en el ciclo evolutivo. La ciencia nos pone los pies en la tierra, o más bien debajo de ella.
Desenterramos en esta muestra, las luchas, los temores y la eterna esperanza a la que la vida somete al hombre desde el principio de los tiempos"
Y puesto que hablamos de antepasados, huesos, miedos y demás cosas, qué mejor que acompañar el asunto con un vídeo de Bonet de San Pedro junto con Javier Gurruchaga y la Orquesta Mondragón, cantando el famoso Raska-yu: